Los huevos generalmente provienen de una de estas dos fuentes: de operaciones de alimentación de animales confinados o CAFO por sus siglas en inglés, donde las gallinas están enjauladas en el interior, o de pequeñas granjas donde las gallinas no están confinadas sino que se les permite pastar libremente.
La alimentación natural de las gallinas consiste en semillas, plantas verdes, insectos y gusanos. Las gallinas CAFO son alimentadas principalmente con una alimentación a base de maíz y soya; la mayoría de las cuales son transgénicas o genéticamente modificadas. La diferencia en la alimentación hace que los huevos que producen muy diferentes nutricionalmente.
Usted puede saber si los huevos son de gallinas criadas al aire libre por el color de la yema de huevo. Las gallinas alimentadas con forraje producen huevos con yemas de color naranja brillante. Las yemas de color amarillo pálido son un signo seguro de que está recibiendo huevos de gallinas criadas en jaulas que no se permiten a forraje para su alimentación natural.
Los huevos de corral son realmente un alimento ideal, no son solamente unos de las mejores proteínas que usted puede conseguir, sino también son unos de los más baratos. Es mejor comerlos crudos o pasados por agua. Los huevos revueltos son los más dañados, y no proporcionará los beneficios de salud que los huevos crudos o parcialmente cocidos.
¿Alguien más no puede vivir sin sus huevos de gallina? ¡Yo los amo!
No entiendo cómo alguien puede estar tan obsesionado con los huevos de gallina. Hay muchas otras cosas en la vida para amar y disfrutar. Cada quien con sus gustos, supongo.
¡Vaya, quién hubiera pensado que los huevos de gallina podrían generar tanto debate! ¿Alguien más tiene una opinión sobre esto?
¡Claro que sí! No puedo creer que estemos discutiendo sobre huevos de gallina. Deberíamos estar ocupando nuestro tiempo en temas más importantes. ¡Vamos, hay cosas más interesantes de las que hablar!
¡Vaya! Nunca imaginé que los huevos de gallina pudieran tener tanta historia y procedencia. ¡Interesante!
¡Qué interesante! Nunca me imaginé que los huevos de gallina tuvieran tanta historia detrás.
¡Vaya, nunca me imaginé que los huevos de gallina pudieran tener tanta controversia! ¿Quién lo diría?